Vaticano, 8 de mayo del 2025.- El sucesor de Pedro tiene un lugar destinado a llorar, la sala de las lágrimas o del llanto.
Luego se colocará los ornamentos papales blancos y rojos con los que se presentará en público desde la Logia de las Bendiciones de la Basílica de San Pedro.
Nada se deja al azar en los ritos de la Iglesia. Desde el momento en que muere el Pontífice hasta la elección del nuevo, cada fase está prevista y tiene su propia liturgia.
Incluso la gran emoción, el desconcierto, el peso de la responsabilidad de asumir el rol de sucesor de Pedro y hasta el eventual llanto que esto conlleva está contemplado y tiene un lugar destinado a liberarlo: se trata de la Camera lachrimatoria, conocida como la sala de las lágrimas o del llanto.
Es una pequeña sacristía, situada a la izquierda del altar de la Capilla Sixtina. Incluso el tiempo está medido y es preciso, comprendido entre la fase de aceptación y la de la vestimenta.
Fuente: El Clarín