La política es como el fútbol, no se sabe lo que pasará hasta el último segundo. Ayer Tuto en conferencia de prensa anunciaba que se postulaba a la presidencia con el partido Frente Revolucionario de Izquierda. Este anuncio despertó mi inquietud de escribir un artículo al respecto señalando lo difícil que hacen los candidatos para que uno vote por ellos. Agregaba que gran parte de la sociedad no quiere saber de izquierda, ni de socialismo, y que un libertario como Tuto se vaya con una sigla de izquierda me parecía un desacierto, sin embargo, reconocía que era el mejor candidato hasta ahora.
Hubieron muchos que opinaron de la misma forma y otros que intentaron minimizar la sigla, con una y otra explicación. Lo cierto es que si hubiese sido tan indemne la alianza con el FRI de Tuto no se hubiese requerido de explicación alguna, sin embargo, los numerosos artículos desvirtuando el daño de la sigla confirman nomas que el anuncio no a todos cayó bien.
Ahora analizando la alianza anunciada hoy entre Tuto Quiroga, Camacho, Mesa y Doria Mendina, está claro que todos reaccionaron rápido. Tuto con la alianza consigue tranquilizar a quienes se asustaron por la alianza con el FRI, y los demás ante la delantera que sacó Tuto de anunciar su candidatura adelantándose a decir yo soy el mejor candidato y si quieren me siguen.
Los otros no quisieron quedarse sin nada y era preferible compartir el pastel, de esta manera todos «contentos». De todas maneras hay que destacar la rapidez con la que hicieron el sana sana y creo que eso los ayuda a todos ellos, y desde luego, brinda mayor seguridad y esperanza a la población. Sin embargo, como ya hemos visto, la política es dinámica, ayer Mesa declaraba su desconcierto por el anuncio de Tuto y la alianza con el FRI y hoy están juntos. Está claro que la consigna para salvar al país de la catástrofe en la que se encuentra es todos contra el MAS y eso será más fácil con la unión y consenso entre los opositores, por lo menos, entre los que más se pueda, porque seguro habrá algunos que no se aliaron con nadie, por ego, por principios o por componendas políticas elucubradas en el oscurantismo. Pero esto recién comienza, habrá que esperar y confiar que el enamoramiento sea sólido, porque somos testigos de alianzas que se han roto a días de las elección o apenas pasadas estas, esperemos que se consolide el matrimonio y que sea hasta que la muerte los separe (Acabar con socialismo inoperante, perverso, nefasto, es decir con el MAS) por el bien del país. Seguramente hasta enero o febrero del 2025 tendremos todas las cartas sobre la mesa y se sabrán qué candidatos más se presentan, qué ofrecen, o si se trata de uno solo. De todas maneras a la alianza recién formada, no dificulten su posicionamiento, no subestimen los errores, que algunos se convierten en insalvables. Aún hay mucho por recorrer y qué sorpresas aparecerán en el camino. ¡Dios salve Bolivia!